Modelando el servicio a Cristo ante nuestros hijos
En nuestro hogar fue donde comenzó el servicio, con tareas tan básicas como ayudar a doblar su ropa, recoger sus juguetes y otras responsabilidades según la etapa de crecimiento.
En nuestro hogar fue donde comenzó el servicio, con tareas tan básicas como ayudar a doblar su ropa, recoger sus juguetes y otras responsabilidades según la etapa de crecimiento.
Que aquello que has vivido te sirva para poder ayudar a otras a vivir cara a cara el evangelio y viviendo vida transformadas porque Cristo nos da esa oportunidad.
Querida hermana sea que tus pecados hayan sido antes de ser cristiana, o si esos pecados los has cometido siendo cristiana, recuerda que si te has arrepentido, en Cristo hay esperanza.
Las telenovelas se burlan de los valores, hacen ver que lo malo sea bueno y lo bueno sea malo.
Amada, te animo a tomar una decisión rotunda sobre lo que permites invadir tu mente y ocupar tu tiempo. ¡Dediquémonos a la alimentación espiritual y el servicio a nuestro Señor!
Esto no tienen nada que ver con que la mujer tenga un trabajo secular o no, pues la vida como esposas y madres es un arduo trabajo, y necesitamos ayuda para poder renovar fuerzas espirituales y físicas.
Querida hermana, no pienses que yo no he luchado conmigo misma para pedirle ayuda a mi esposo de una manera que a honre a Dios. En el proceso, Dios me ha llevado a rendirme a sus pies, y ha venido transformando maneras de actuar contrarias a la Palabra que traía de mi antigua vida.
Todos sabemos que la oración es vital para el cristiano. La verdadera pregunta es si vivimos conforme a esta verdad.
La oración no es para entretenernos, sino un mandato de nuestro Señor Jesucristo para cultivar nuestra relación con Él y nuestro crecimiento espiritual.
Que el Señor nos ayude a enfrentar las dificultades del matrimonio centradas en Cristo y en la Palabra divinamente inspirada por el Espíritu Santo. No hay nada que pueda sustituir la sabiduría de Dios si actuamos conforme a ella.